La premura en el Congreso Nacional por aprobar en menos de un mes y a la carrera una modificación a la Ley de Aviación Civil no surgió únicamente por tratarse de una propuesta proveniente del gobierno, sino porque la República Dominicana estaba obligada a reformar la normativa para no bajar de categoría internacional en materia de vuelos.
En abril, una comisión de la Federación de Aviación Civil de los Estados Unidos (FAA) visitó la República Dominicana para inspeccionar los vuelos que salen del territorio nacional hacia la zona norteamericana. Tras la revisión, el equipo dio un plazo de 45 días para que las autoridades dominicanas modificaran la Ley de Aviación Civil, ajustándola a un nuevo estándar y regímenes de consecuencias más fuertes.
Así lo confirmó el diputado Napoleón López, quien presidió el equipo especial de legisladores que estudió las modificaciones. El informe favorable que realizó dicha comisión de congresistas al concluir el análisis de la pieza legislativa respalda esta información.
"En septiembre del 2023 vino una comisión de la Federación de Aviación Administrativa (FAA), que es la Federación de Aviación Civil de los Estados Unidos. Esa federación, como es natural, tiene por objeto perseguir que las aeronaves que ingresen a territorio norteamericano tengan un nivel de seguridad y que los pilotos tengan la formación precisa para evitar cualquier riesgo con el pasajero", reza el informe que aprobaron los diputados.
La urgencia de esta reforma se debe a la necesidad de mantener la categoría internacional que permite a los vuelos dominicanos operar en el espacio aéreo norteamericano sin restricciones adicionales. Una degradación en la clasificación tendría serias repercusiones para las aerolíneas nacionales, afectando tanto el turismo como el comercio.
El diputado López enfatizó la importancia de cumplir con los nuevos estándares internacionales, subrayando que el proceso de modificación de la ley fue exhaustivo y que se realizaron los ajustes necesarios para alinearse con las regulaciones exigidas por la FAA. "La seguridad de los pasajeros y la reputación de nuestro país en la aviación internacional están en juego", destacó López.
La rápida aprobación de las modificaciones a la Ley de Aviación Civil no solo refleja el compromiso del gobierno y del Congreso Nacional con la seguridad aérea, sino también la necesidad imperiosa de mantener el estatus de la aviación dominicana en el ámbito internacional. La adaptación a las normativas internacionales es crucial para evitar sanciones y asegurar que los vuelos entre la República Dominicana y los Estados Unidos se realicen bajo los más altos estándares de seguridad y eficiencia.