Joe Biden se dirigió a los estadounidenses para enfatizar la importancia de defender la democracia en un momento crucial para la nación. Rodeado de retratos de presidentes históricos, Biden subrayó que las decisiones que se tomen ahora determinarán el futuro del país y del mundo. Afirmó que, en la defensa de la democracia, su compromiso con el bienestar de Estados Unidos supera cualquier ambición personal o título. Biden sorprendió al anunciar que no buscará un segundo mandato, eligiendo en su lugar pasar la antorcha a una nueva generación de líderes. Destacó la necesidad de nuevas voces, más jóvenes, para continuar uniendo y progresando como nación. En su discurso, también resaltó los logros de su administración, como la creación de empleos, el aumento de salarios, la reducción de la inflación y los avances en la innovación y la fabricación. Reafirmó su compromiso con la reforma de la Corte Suprema, la protección de los derechos civiles y la lucha contra la violencia y el extremismo. El presidente también destacó su éxito en fortalecer la OTAN, contrarrestar la influencia de China y trabajar por la paz en el Medio Oriente. Subrayó que Estados Unidos no está en guerra en ninguna parte del mundo y llamó a los estadounidenses a unirse y respetarse mutuamente. Biden concluyó su discurso con un mensaje de esperanza y unidad, instando a los ciudadanos a mantener la fe y recordar la grandeza de Estados Unidos como nación unida y capaz de superar cualquier desafío cuando actúan juntos.