El Gobierno de Venezuela retiró este lunes a todo su personal diplomático en la República Dominicana y otros seis países. La medida responde a lo que Caracas describe como "injerencias acciones y declaraciones de un grupo de gobiernos de derechas, subordinados a Washington," acusándolos de intentar reeditar el fracasado Grupo de Lima.
El canciller Yván Gil anunció que la retirada incluye al personal diplomático venezolano en Argentina, Chile, Costa Rica, Perú, Panamá, República Dominicana y Uruguay. Esta acción se toma como una protesta frente a lo que Venezuela considera una intervención en sus asuntos internos y un apoyo a iniciativas contrarias a su gobierno.
Esta decisión podría afectar significativamente las relaciones bilaterales y la cooperación entre Venezuela y los países mencionados. Venezuela reafirma así su defensa de la soberanía ante lo que percibe como una amenaza de desestabilización por fuerzas externas, marcando un nuevo capítulo en sus ya tensas relaciones internacionales.