En una ceremonia solemne celebrada en el Capitolio, Donald Trump fue investido como el 47.º presidente de Estados Unidos. Acompañado por su familia, miembros de su gabinete y una multitud de simpatizantes, Trump juró el cargo, marcando su regreso al poder tras una histórica campaña.
Con 78 años, Trump se convierte en el presidente de mayor edad en asumir el cargo, superando a Joe Biden, quien tomó posesión a los 77 años en 2021. Este hito refuerza su influencia en la política estadounidense y su capacidad para movilizar a su base de votantes a pesar de los desafíos de los últimos años.
Además, Trump entra en los libros de historia como el segundo presidente en recuperar la Casa Blanca después de perder una reelección, un logro previamente alcanzado solo por Grover Cleveland, quien gobernó en los periodos 1885-1889 y 1893-1897.
En su primer acto oficial como presidente, Trump firmó una serie de órdenes ejecutivas enfocadas en sus principales promesas de campaña, señalando el inicio de un gobierno centrado en su agenda política. Su regreso plantea interrogantes sobre el futuro de la nación y el rumbo que tomará bajo su liderazgo.
La investidura de Trump representa un momento histórico que resalta la polarización y resiliencia del sistema democrático estadounidense, al tiempo que marca el inicio de un nuevo capítulo en su carrera política.
