El Hoyo de Friusa fue escenario de una manifestación pacífica que, pese a desarrollarse sin incidentes durante casi una hora, terminó en un enfrentamiento cuando la Policía Nacional intervino para impedir que los manifestantes alteraran la ruta establecida. Los agentes recurrieron al uso de gases lacrimógenos y chorros de agua para dispersar a los participantes.
La marcha, convocada por la organización Antigua Orden Dominicana, tuvo lugar en la calle central de este sector del este de la República Dominicana, donde residen miles de haitianos. Durante el recorrido, los manifestantes portaron banderas dominicanas, pancartas y corearon consignas en contra de lo que consideran una creciente presencia de inmigrantes ilegales en la zona.
Sin embargo, al llegar al área denominada "Los Alto de Friusa", un grupo intentó desviarse de la ruta previamente establecida, lo que motivó la intervención policial. Ante la negativa de los agentes a permitir el cambio de recorrido, algunos manifestantes reaccionaron lanzando piedras y otros objetos, lo que desató una respuesta contundente de la Policía con el uso de bombas lacrimógenas y chorros de agua a presión.
El temor a desórdenes provocó el cierre de la mayoría de los comercios de la zona, mientras que muchos residentes haitianos optaron por resguardarse en sus viviendas o abandonar temporalmente el lugar. Desde horas tempranas, docenas de agentes de la Policía Nacional, la Armada y el Ejército habían sido desplegados en diversos puntos del sector con el objetivo de garantizar la seguridad.
La represión de la manifestación pacífica ha generado diversas reacciones en la opinión pública, con sectores que denuncian el uso desproporcionado de la fuerza por parte de la Policía y otros que justifican la actuación de las autoridades en función del orden público. Hasta el momento, no se ha informado sobre detenidos ni heridos de gravedad a raíz del incidente.
