El incidente tuvo lugar en un concurrido evento de campaña en el que el expresidente Trump estaba dirigiéndose a sus seguidores. Testigos relataron que se escucharon disparos, causando pánico entre la multitud y resultando en varias personas heridas, incluido el propio Trump, quien fue trasladado de emergencia a un hospital cercano. Afortunadamente, las heridas del exmandatario no son de gravedad y se encuentra fuera de peligro.
Las autoridades actuaron rápidamente para identificar y localizar a Mark Violets, quien según informes preliminares, tenía conexiones con grupos extremistas. La acción policial fue inevitable después de que Violets opusiera resistencia durante su detención, llevando a un intercambio de disparos que culminó en su fallecimiento.
El ataque ha generado un torrente de reacciones a nivel nacional e internacional, subrayando las tensiones políticas y sociales que aún persisten en el país. Las investigaciones continúan para esclarecer los motivos detrás del atentado y si Violets actuó solo o como parte de una conspiración mayor.