
El Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales informó este martes la paralización inmediata de las labores que realizaba el hotel Grand Sirenis Punta Cana en la playa de Uvero Alto, debido a graves violaciones a las normativas ambientales dominicanas, específicamente en lo relacionado con el manejo del sargazo y el uso inadecuado de equipos pesados en zonas costeras protegidas.
Según un comunicado oficial, las intervenciones ejecutadas por el hotel —propiedad del Grupo Matute— se llevaron a cabo sin contar con el permiso ambiental requerido, en abierta contravención a lo estipulado en la Ley 64-00 sobre Medio Ambiente y Recursos Naturales.
Alteración del equilibrio ecológico
Durante un operativo de verificación realizado por técnicos del Ministerio en coordinación con el Servicio Nacional de Protección Ambiental (SENPA), se constató la remoción total de la capa freática del suelo en varios puntos, lo cual representa una seria alteración del equilibrio hidrogeológico costero, una zona de alto valor ecológico y vulnerable por su proximidad al mar.
Las autoridades también encontraron serias irregularidades como la ausencia de un gestor ambiental acreditado, figura obligatoria en cualquier intervención que involucre el manejo de sargazo, según las normativas vigentes.
Daños a hábitats de especies en peligro
Una de las infracciones más graves constatadas fue la afectación directa a zonas de anidamiento de tortugas marinas, en particular de la especie Eretmochelys imbricata o tortuga carey, que se encuentra en peligro crítico de extinción y está protegida tanto por leyes dominicanas como por convenios internacionales.
Además, se detectó el acopio de sargazo dentro de la zona de pleamar, lo que va contra los lineamientos técnicos del Viceministerio de Recursos Costeros y Marinos, ya que dicha práctica puede ocasionar contaminación por descomposición, afectando negativamente a la flora y fauna nativa del litoral.
Acciones legales en marcha
El Ministerio aseguró que ya se ha iniciado el proceso legal contra los responsables, a fin de que sean sancionados de acuerdo con la gravedad de los hechos. “Las normas ambientales no pueden seguir siendo ignoradas. Actuaremos con firmeza para proteger nuestros ecosistemas costeros”, señala la nota oficial.
Este caso se suma a una creciente preocupación por el impacto que ciertas prácticas turísticas y hoteleras están teniendo sobre los frágiles entornos naturales del país, en momentos donde el sargazo representa un reto ambiental importante para las costas del Caribe.