Un apagón informático global ha afectado a importantes bancos, aerolíneas y medios de comunicación, debido a una falla en el sistema operativo Windows que causó pantallas azules y mensajes de “error fatal”. La interrupción ha provocado caos en vuelos, emisiones de radio y televisión, y operaciones de supermercados y entidades bancarias en todo el mundo.
La empresa de ciberseguridad Crowdstrike fue identificada como la responsable de la falla, debido a una actualización defectuosa de su programa antivirus. George Kurtz, director ejecutivo de Crowdstrike, aseguró que el defecto se ha identificado y solucionado, y que el problema no está relacionado con un ciberataque. Sin embargo, la empresa ha sufrido una caída del 20% en su valor de mercado, equivalente a US$16,000 millones en pérdidas.
El impacto ha sido global, afectando a aeropuertos en Australia, Japón, Europa, Estados Unidos e India. Empresas como American Airlines, United y Delta han tenido que suspender vuelos, mientras que sistemas de salud y transporte también han reportado problemas significativos. La situación subraya la importancia de la seguridad y estabilidad en los sistemas tecnológicos para evitar interrupciones de esta magnitud.